Mediante un diseño de control distribuido se define el funcionamiento de un total de 11 estaciones depuradoras de agua residual. Con ese diseño se centraliza y se gestionan las 11 depuradoras y a la vez se traslada el sistema de control a las cinco depuradoras de mayor alcance y con un nivel más alto de control y mantenimiento.
Las acciones sobre las diferentes depuradoras son dirigidas en el centro principal de gestión y mantenimiento, minimizando el tiempo de actuación y evitando múltiples desplazamiento para su resolución. También permite una planificación y gestión de los procedimientos de mantenimiento preventivo, y proporciona el mejor entorno para un desarrollo evolutivo de todas sus instalaciones simplemente desarrollando desde un único entorno.
Para gestionar un área tan extensa y la diferencia de distancias entre depuradoras se define una red de comunicaciones basada en redes virtuales privadas sobre 3G. Esta red de comunicaciones proporciona el ancho de banda necesario para atender las necesidades de comunicaciones entre el centro de control principal y los diferentes sub centros.
Mediante tecnología OPC DA se consigue homogeneizar el protocolo de comunicaciones de las diferentes estaciones depuradoras (EDAR) con los dispositivos existentes en planta y el centro de control principal.